por María Luisa de Miguel
Quién no se ha preguntado próximo a los 40, 50, 60, 70 o más ¿y ahora qué?, ¿qué hago aquí? o quizás ¿van a ser así los próximos 40 años de mi vida?
A estas preguntas no les vale cualquier respuesta para salir del paso, no les vale el silencio, no les sienta bien que las ignoren. Te persiguen a donde quiera que vayas, te esperan para asaltarte a la vuelta de la esquina, y aunque pasen 1, 2, 3 o más años, siguen ahí, y se manifiestan una y otra vez, no dejándote vivir.
Fuente: https://kwfoundation.org