La neurobiología de la salud mental y la resiliencia es un campo fascinante que explora las intrincadas conexiones entre el cerebro, las emociones y el comportamiento. La neuroplasticidad y la adaptación cerebral son mecanismos clave que contribuyen a la capacidad de recuperarse de la adversidad y mantener el bienestar mental. Los investigadores están descubriendo información valiosa sobre los fundamentos neurobiológicos de la resiliencia mediante el estudio de marcadores biológicos.
por Deliana Infante – Reviewed by Danielle Ellis, B.Sc.
La resiliencia es la capacidad de un individuo para soportar y superar los efectos sociales, psicológicos y biológicos perjudiciales del estrés severo que, de otro modo, podrían poner en peligro su salud mental y física. Estudios recientes sugieren que la resiliencia humana no es simplemente la ausencia de respuestas patológicas observadas en individuos vulnerables, sino más bien un proceso activo y adaptativo.
El campo de la neurobiología de la resiliencia proporciona información valiosa sobre los mecanismos biológicos responsables de la capacidad de un individuo para adaptarse a la adversidad. La genética y el eje neuroendocrino se encuentran entre los factores biológicos que contribuyen a ello. Además, los factores psicológicos, incluido el contexto social del desarrollo, influyen significativamente en la resiliencia. Estos factores están interconectados y pueden determinar si un individuo exhibe un comportamiento resiliente.
Fuente: https://publicaciones.sociales.uba.ar/index.php/lavboratorio/article/download/6157/pdf